Los primeros resultados del sistema de incentivos pionero de Recyclia para aumentar la recogida de pequeños aparatos electrónicos mediante contenedores inteligentes, demuestran que recompensar a los ciudadanos por deshacerse de estos dispositivos favorece su reutilización y contrarresta el ‘efecto tesoro’, como se conoce a la tendencia a acumularlos en el hogar. En concreto, el 4,3% de los 161 aparatos retirados, hasta el momento, de los dos contenedores instalados desde el pasado noviembre en el municipio vizcaíno de Getxo son reutilizables, un porcentaje superior al registrado con el sistema tradicional. Asimismo, la entidad valora que sólo el 0,62% de los residuos depositados no se corresponde con un aparato electrónico.
En lo que se refiere a la tipología, cabe señalar que el 43,5% del total de aparatos depositados en los contenedores corresponde a dispositivos de electrónica de consumo, fundamentalmente, mandos a distancia, cargadores, cableado, auriculares, ratones, etc. A continuación, el 35,4% corresponde a teléfonos móviles y el 9,3% a ordenadores portátiles y tabletas. El resto son juguetes eléctricos, equipos de audio y video y otro tipo de dispositivos de uso doméstico.
Estos primeros resultados demuestran, a juicio de Recyclia, la eficacia de recompensar con mayores incentivos a los usuarios que depositan aparatos en mejores condiciones y son aptos para su reutilización tras su acondicionamiento, frente a aquellos dispositivos averiados y que, por tanto, son destinados a plantas de reciclaje. En este sentido, cabe señalar que más de la mitad de los aparatos recogidos y reutilizables son teléfonos móviles.
Asimismo, los datos confirman que la comunicación y, en concreto, la campaña de concienciación desarrollada en el municipio, por ejemplo, en centros educativos, da como resultado un bajo índice de residuos impropios, aquellos que el usuario deposita en contenedores equivocados por desconocimiento o desinterés.
Esta iniciativa es una de las cuatro experiencias piloto integradas en el proyecto europeo “CIRC4Life”, cuyo objetivo es estudiar la viabilidad de nuevos modelos de negocio basados en la Economía Circular.
Los estudiantes españoles han recogido 63.385 kilos de pilas usadas ,en 2018, en los casi 5.000 contenedores que Ecopilas tiene instalados en los colegios de toda España. Se trata de un 10% más que en 2017, algo que certifica el peso cada vez mayor de la comunidad escolar para difundir prácticas en favor de la sostenibilidad y la protección del medio ambiente.
Ecopilas dispone de contenedores en colegios de educación infantil y primaria, institutos de secundaria, universidades, escuelas de vela y conservatorios de música de todas las Comunidades Autónomas. En concreto, esta red representa el 6% de los más de 35.000 que tiene desplegados en nuestro país en edificios públicos, grandes superficies o establecimientos comerciales.
Además, Ecopilas puso en marcha el pasado junio la campaña ‘Acoge un contendedor’ con la que los responsables de los centros educativos pueden solicitar el envío gratuito de un contenedor. Desde su puesta en marcha, la fundación ya ha repartido 182 contenedores, siendo los centros escolares andaluces los más implicados con un 29% del total repartido.
Como parte de esta campaña, Ecopilas envía, además, recopiladores domésticos y material didáctico sobre el funcionamiento de las pilas, sus tipos y componentes, así como las ventajas de su reciclaje para ahorrar materias primas y proteger el medio ambiente. Asimismo, este año, la fundación impartirá talleres formativos en centros de toda España.
Un estudio realizado por Eucobat, asociación a la que pertenece Ecopilas, evidencia que el objetivo obligatorio de recogida establecido por la UE para las pilas no es coherente ni realista, al basarse en la cantidad de baterías comercializadas, en lugar de en las desechadas.
La Directiva Europea regula la gestión de estos residuos fija un índice mínimo de recogida anual, calculado sobre las pilas puestas en el mercado en los tres años anteriores. Así, desde 2016, éste se sitúa en el 45% de las pilas puestas en el mercado en los tres últimos años, aumentando al 50% en 2020.
Según Ecopilas, este objetivo debe basarse en la cantidad de residuos disponibles para su recogida, dado que la mayoría de las pilas y baterías comercializadas en Europa no son desechadas en un plazo de tres años, a partir de la fecha en que se pusieron en el mercado. Así lo demuestra el análisis, realizado por Eucobat y en el que ha participado Ecopilas, del impacto de la vida útil de distintos tipos de baterías en el volumen de recogida, a partir del seguimiento de 154.000 pilas en España, Francia, Bélgica, Holanda, Alemania y Rumanía, responsables del 53% de las comercializadas en la UE.
Según se desprende del estudio, la edad media de una batería es de, aproximadamente, 5,2 años en el mercado comunitario y de 4,9 en nuestro país, por lo que Ecopilas solicita a la Comisión Europea establecer un nuevo criterio de cálculo coherente con la realidad de este mercado.
Ecopilas ha repartido 12.400 recopiladores domésticos para pilas usadas entre los hogares españoles desde la puesta en marcha, el pasado junio, de la campaña ‘Adopta un recopilador’. Con esta iniciativa, la fundación medioambiental trata de concienciar a los ciudadanos de la importancia de depositar estos residuos en los contenedores adecuados para facilitar así su reciclaje.
A través de un formulario disponible en su web, los usuarios pueden solicitar el envío gratuito de un recopilador a su domicilio. Asimismo, disponen de un mapa en el que consultar el contenedor más cercano a su domicilio, con tan solo introducir su código postal. Actualmente, la fundación cuenta con la red de puntos de recogida más amplia de nuestro país, con más de 37.000 contenedores desplegados en establecimientos comerciales, grandes superficies, empresas y edificios públicos.
Por comunidades autónomas, los andaluces son los que más recopiladores han solicitado, con un 19% del total repartido, seguidos de los madrileños (16%), valencianos (11,3%) y catalanes (10,6%).
Desde el inicio de su actividad en 2008, Ecopilas ha repartido 2,7 millones de recopiladores domésticos, fundamentalmente, con motivo de su participación en eventos deportivos, tanto amateurs como profesionales, en los que lleva a cabo campañas de información y recogida. Solamente a través de la campaña ‘Adopta un recopilador’, la fundación prevé repartir más de 25.000 recopiladores en 2019.
EUCOBAT, organización que reúne a los sistemas de reciclaje de pilas más importantes de Europa, ha desarrollado la primera aplicación móvil que permite a los usuarios conocer su punto de recogida más cercano de este tipo de residuos en todo el continente europeo.
La app, denominada como la organización y disponible para Android e iOS, recoge la ubicación de 340.000 recopiladores en Bélgica, Francia, Países Bajos, Luxemburgo, Turquía, Italia y España, lista que se completará en breve con los contenedores del resto de países miembros de EUCOBAT. Precisamente, 32.000 de estos recopiladores corresponden a la red instalada en nuestro país por Ecopilas.
Y además de localizar los recopiladores más cercanos, los usuarios también pueden usar la aplicación para consultar dudas y consejos sobre la recogida y el reciclaje de pilas y baterías, así como información y datos de contacto de los sistemas nacionales de gestión de estos residuos.
El lanzamiento de esta app, que ya se encuentra disponible para su descarga gratuita en las plataformas App Store y Google Play, coincide con la celebración, el próximo 9 de septiembre, del Día Europeo del Reciclaje de Pilas.
Sensibilización medioambiental y deporte demostraron ser un binomio de éxito en 2011, cuando Ecopilas patrocinó, de forma pionera en nuestro país, el Premio de la Regularidad de la Vuelta a España. Entonces, los aficionados ya demostraron una gran sensibilidad hacia las prácticas a favor de la protección del medio ambiente. Por ello, la fundación ha multiplicado, desde ese año, su participación en todo tipo de eventos deportivos amateurs y profesionales, para acercar la recogida de pilas a los ciudadanos.
Este verano, concretamente, la fundación colaborará con la Vuelta a España y a Burgos, el Descenso Internacional del Sella y su versión adaptada y deportes náuticos, a través de la Fundación Ecomar.
En la práctica, Ecopilas llevará a cabo campañas de recogida durante la Vuelta a Burgos (1 al 5 de agosto), el Descenso Internacional del Sella (día 5) y la Vuelta a España, que dará comienzo el 19 de agosto en Nîmes. Para ello, instalará recopiladores idénticos a los más de 37.000 que tiene desplegados por toda España, en las líneas de salida y meta de todas las etapas de las rondas ciclistas y, en el caso del Descenso, en Arriondas y Ribadesella.
Asimismo, entregará el Premio de la Deportividad, en 11 etapas, entre ellas la contrarreloj inaugural en Nîmes y la ascensión al Alto del l’Angliru. El ganador depositará unas pilas en un recopilador situado en la línea de salida.
Por último, el 1 de julio, Ecopilas y la Fundación Ecomar pusieron en marcha la tercera edición de la campaña de recogida ‘Ponte las pilas y recicla’, en la que participan 64 clubes náuticos, escuelas de vela y marinas y otros centros dedicados a la náutica de toda España. La iniciativa premiará con material deportivo a los tres clubes que retiren más pilas, hasta el 31 de agosto.
Una temporada más, el Extremadura-Ecopilas se ha estrenado con pódium en el circuito profesional de mountain bike. Es el caso de la la Vuelta a Córdoba BTT, la 4 Stages MTB Lanzarote o la Titán de los Río, por mencionar sólo algunas de las competiciones disputadas hasta el momento por el equipo extremeño.
Pero si la competitividad del Extremadura-Ecopilas está más que probada en el terreno deportivo, sucede lo mismo en el medioambiental, desde 2016, año en el que el equipo fue patrocinado por primera vez por la fundación medioambiental a la que debe su nombre desde entonces.
En este campo, el mayor triunfo del Extremadura-Ecopilas la pasada temporada fue el de recoger y reciclar 360 kilos de pilas usadas a través de diferentes acciones de sensibilización ciudadana. Con el objetivo de seguir difundiendo prácticas a favor de la protección del medio ambiente entre los aficionados al ciclismo, la fundación medioambiental Ecopilas ha decidido renovar su colaboración con el equipo profesional de mountain bike.
Concretamente, en 2016, la fundación medioambiental y el Extremadura-Ecopilas promovieron la recogida de pilas instalando recopiladores para estos residuos, con motivo de la disputa de la Marcha BTT Monfragüe Reserva de la Biosfera y la Titán Villuercas, celebradas en los municipios cacereños de Casatejada y Logrosán, respectivamente. Además, el Extremadura-Ecopilas ha contribuido a la ampliación de la red de puntos de recogida de la fundación en la región, mediante la instalación de contenedores en los establecimientos comerciales de GR-100 Sports, también patrocinador del equipo.
La presentación oficial del Extremadura-Ecopilas tuvo lugar el pasado 15 de febrero en Plasencia con la asistencia de una decena de medios de comunicación.
Buena muestra del avance que nuestro país ha experimentado desde la entrada en vigor de la obligación de reciclar pilas y baterías, es que, en tan solo ocho años, España ya dispone de la segunda red de recogida de estos residuos más amplia de Europa, solamente por detrás de Alemania.
Gracias a los 37.009 recopiladores que la fundación medioambiental Ecopilas ha desplegado en España, nuestro país ya reúne el 10% de los 380.935 instalados por los 16 sistemas colectivos asociados a la organización panaeuropea Eucobat.
Por su parte, Alemania, “país con una cultura del reciclaje mucho más arraigada en la sociedad y desde hace más tiempo que en España, más de dos décadas”, según explica José Pérez, presidente de Ecopilas, cuenta con 169.658 puntos, el 44,5% del total desplegado en Europa.
Otro dato a reseñar de este destacado avance en materia medioambiental es que España dispone de 796 puntos por millón de habitantes, lo que sitúa a nuestro país sólo ligeramente por debajo de la media europea de 912 puntos por millón de habitantes.