El Grupo BMW tiene claro que en el futuro del coche conectado el cliente solicitará información y servicios y que todo lo que muestren las pantallas del automóvil, las aplicaciones o los distintos servicios que están aún por venir, han de descargarse rápidamente y sin fallos. En poco tiempo, para los fabricantes de automóviles, será igual de importante satisfacer las expectativas del clientes a la hora de conducir sus coches, en cuanto a su mecánica y sus prestaciones, como las que tenga puestas en su capacidad de comunicarse y de disponer servicios a bordo, de manera instantánea. 

Por ello, BMW ha decidido ir pensando en este escenario futuro y ha firmado un acuerdo con Dynatrace, empresa líder mundial en la gestión del rendimiento de aplicaciones, para optimizar el rendimiento de los servicios y apps que esta compañía automovilística ofrece actualmente, a través de su plataforma BMW ConnectedDrive. 

Con este acuerdo, BMW quiere, por ejemplo, reducir los tiempos de descarga de distintos servicios, así como incrementar el número y variedad de ellos, dentro de su objetivo de diseñar la arquitectura digital de futuro en este ámbito. Con ello, la compañía alemana quiere dar respuesta al creciente número de usuarios de este tipo de soluciones, así como a sus expectativas, que como mencionábamos anteriormente, son cada vez más altas. 

Según Dynatrace, la aceptación de los servicios digitales dentro del entorno del automóvil van a depender, en gran medida, de la rapidez y de la sencillez de uso. Dynatrace, con su plataforma Digital Performance Management puede ofrecer el más alto nivel de rendimiento a sus clientes, acelerar los servicios, lograr ciclos de lanzamiento más cortos y optimizar los procesos de TI.