El pasado 2 de marzo, celebrábamos con Grup Balfegó, en el restaurante Yugo The Bunker, la VI edición del Observatorio del Atún Rojo. En estos encuentros, que comenzaron en 2010, cuando la especie casi entra en el Apendice I de la Convención de Especies Protegidas (CITES), la compañía ofrece a los medios de comunicación y periodistas dedicados a la información sobre temas pesqueros, ecología, medio ambiente y política la oportunidad de repasar los principales asuntos que atañen al atún rojo, su pesca, comercio y sostenibilidad. 

Agencias de noticias, radios, diarios de información general y económica, los principales diarios online y la prensa especializada y vertical de pesca y alimentación son asiduos a estos encuentros, ya que aquí acceden a información actual, de interés y novedosa sobre estos temas. Además, es un foro en el que Balfegó ejerce la transparencia con los medios y la opinión pública, vocación que también está demostrando el sector pesquero y que han transformado la percepción de la ciudadanía sobre su actividad.

En esta ocasión, el VI Observatorio del Atún Rojo pivotó en torno a tres cuestiones: la posible reforma del sistema de reparto de cuota de atún rojo en España, solicitada con vehemencia por diversas flotas españolas y grupos políticos; las importaciones de atún rojo ilegal procedentes de Turquía; y el crecimiento de las exportaciones a la UE de atún procedente del Pacífico Oriental, una especie de atún rojo (Thunnus Orientalis), que está sobrexplotada, pero al que no se le exige los mismos requisitos documentales que al atún rojo de las flotas europeas para su venta en Europa.

Sobre el primero de estos temas, Balfegó considera que la posibilidad de aumentar cuotas por encima de las cifras que se pescaban antes del plan de recuperación de ICCAT (30.000 tm) ha abierto la veda a reclamaciones de flotas y barcos, grupos políticos y gobiernos autonómicos injustificadas que sólo pretenden aprovechar la excelente situación del stock del Atlántico y Mediterráneo y el mayor precio que se consigue con esta pesca.

En este sentido, sobre la beligerancia de la flota canaria y sus constantes presiones a nivel político, la empresa pesquera de L’Ametlla de Mar recordó que, “los derechos históricos que esgrime sobre la especie son falsos, ya que, en 2008, cuando se hizo el actual reparto, no pudieron aportar documento alguno ante la Administración que lo acreditara”. Según la compañía, modificar la situación actual afectaría a la seguridad jurídica de los barcos que documentaron dichos derechos y asumieron la responsabilidad de recuperar la especie con el duro ajuste que se estableció en ICCAT en 2006.

Y aún fue más allá calificando como injustificadas y debidas a motivos políticos y no sociales, económicos, ni medioambientales, las concesiones otorgadas a estas empresas canarias en los últimos años. Así, en 2008 recibieron 65 tm para hacer pesca dirigida, aunque el pacto era no conceder cuota para esta pesca a flotas de bajas capturas históricas. Este año ya tienen 188 tm, un 34% más que el año anterior, cuando la cuota general para todo ICCAT, Europa y España solo ha crecido un 20%. Y esto sin tener en cuenta que entonces, dichos barcos pescaban entre 4 y 5 mil toneladas de otros túnidos y hoy casi llegan a las 10.000 tm.


En este Observatorio del Atún Rojo también se dio buena cuenta sobre prácticas de pesca abusiva de atún rojo en Pacífico e Indico y la llegada de esta pesca a la UE sin casi control, ya que no precisan la misma documentación que el atún rojo pescado en Mediterráneo y Atlántico Norte. Este es un tema que preocupa a Balfegó y a otras muchas organizaciones ambientalistas y de la sociedad civil, por lo que supone de ataque frontal contra la pesca y comercio responsable y sostenible de especies marinas y en particular del atún rojo.

En cuanto a la pesca ilegal en el Mediterráneo, Balfegó reclamó a la UE que cierre fronteras a los países de ICCAT, sobre todo a Turquía, que han decidido unilateralmente pescar por encima de su cuota asignada, ya que están exportando y vendiendo en la UE ese atún pescado ilegalmente. Este tipo de situaciones ponen en riesgo la especie e inciden negativamente en los pasos dados en favor de un consumo y comercio responsable de la especie.

Publicado en Balfegó